🏷️ Categorías: Lecciones de vida, Tiempo.
Esta no es una carta triste. No del todo, al menos. Pero sí es una carta sobre la muerte.
Nos pasamos la vida esquivando el tema, como si ignorarlo pudiera volverlo menos cierto. Y sin embargo, qué ironía, es precisamente el hecho de recordarlo lo que da sentido a todo lo demás. Entender que es inevitable te hará vivir sin arrepentimientos y con una apreciación profunda de cada instante.
Aceptar la muerte, en lugar de evitarla, cambia las reglas del juego.
Te diré 5 reflexiones sobre la muerte que cambiarán tu perspectiva de la vida.
1. La muerte aclara lo que importa
Imagínate que te quedan 6 meses de vida.
¿Seguirías haciendo lo que haces hoy?
¿Seguirías rodeado de las mismas personas?
¿Seguirías aplazando lo que llevas tanto tiempo dejando?
El problema es que vivimos como si fuéramos eternos.
Nos preocupamos por lo que otros piensan, perseguimos cosas que en el fondo no nos llenan y gastamos una inmensa cantidad de tiempo en trivialidades. No somos realmente conscientes de cómo empleamos nuestro tempo; medimos el paso del tiempo con relojes, pero no medimos en qué cosas pasamos nuestro tiempo.
Pero cuando nos damos cuenta que somos finitos, todo cambia.
De repente, las expectativas ajenas dejan de importar. El miedo al fracaso se esfuma. Y solo queda una pregunta: ¿Qué es lo que realmente me importa?
Steve Jobs recibió una de las noticias más duras que alguien puede recibir. Los médicos detectaron cáncer de páncreas y le quedaban 6 meses de vida. Con ese diagnóstico en mente, dijo esto a unos alumnos universitarios en EEUU.
“Cuando yo tenía 17 años, leí una cita que decía algo así como: «Si vives cada día como si fuera tu último día, algún día tendrás razón». Me impresionó, y desde entonces desde entonces, durante los últimos años, me he mirado al espejo cada mañana y me he preguntado: «Si hoy fuera el último día de mi vida, ¿querría hacer lo que estoy a punto de hacer hoy?» Y siempre que la respuesta ha sido «No» durante varios días seguidos, sabía que tenía que cambiar algo.”
“Tu tiempo es limitado, así que no lo malgastes viviendo la vida de otro. No dejes que el ruido de las opiniones de los demás ahogue tu propia voz interior. Y lo más importante, ten el valor de seguir tu corazón y tu intuición. De alguna manera, ellos ya saben lo que realmente quieres llegar a ser. Todo lo demás es secundario.”
— Steve Jobs, discurso en la Universidad de Stanford, 2005.
Hacerte esta pregunta con regularidad te dará una claridad brutal sobre lo que es esencial y lo que no. Y esa claridad es la que te permitirá vivir sin arrepentimientos.
2. Las decisiones se vuelven fáciles
Si recordaras que tu tiempo es limitado, tomarías decisiones más rápido.
La parálisis por análisis desaparecería. No perderías años en un trabajo que odias. No pospondrías conversaciones importantes ni amistades que llevas tiempo sin ver. No dudarías en retomar el contacto con todas esas personas a las que les dijiste que ya quedaríais algún día. No volverías a dudar en si tomar o no ese riesgo que has estado evitando y que sabes que podría cambiar tu vida. No hay espacio para el “luego”.
La muerte nos obliga a decidir.
No podemos darnos el lujo de esperar sin fin. Y, curiosamente, cuando aceptamos la mortalidad, nos liberamos del miedo a equivocarnos. Porque, si miras toda tu vida al completo, el único error grave es gastar tu tiempo en lo que no da sentido a tu vida.
Piensa en esto: ¿Qué estás postergando hoy que, si supieras que tu tiempo es limitado, harías de inmediato? Desde ahí, puedes comenzar a priorizar lo que importa.
Yo respondí hace tiempo: “Escribir”.
3. Te impulsa a vivir una vida auténtica
Bronnie Ware es una enfermera que documentó los 5 arrepentimientos más comunes de las personas antes de morir. Duelen solo de leerlos…
"Ojalá hubiera vivido una vida fiel a mí mismo."
"Ojalá no hubiera trabajado tanto."
"Ojalá hubiera expresado más mis sentimientos."
"Ojalá hubiera mantenido el contacto con mis amigos."
"Ojalá me hubiera permitido ser más feliz."
¿Notas un patrón?
Todos estos arrepentimientos son evitables si tomas conciencia a tiempo. Se dieron cuenta demasiado tarde de lo que advertía Steve Jobs a los universitarios: “No dejes que el ruido de las opiniones de los demás ahogue tu propia voz interior”.
La muerte es un recordatorio, nos ayuda a evitar este error.
Nos empuja a ser auténticos, a asegurarnos de que estamos viviendo en línea con nuestros valores, no con los de alguien más. Dices "no" a lo que no resuena contigo. Te rodeas de personas que realmente te suman. Y, sobre todo, dejas de hacer las cosas por obligación y comienzas a hacerlas por convicción, porque las amas.
4. Cultivas una gratitud profunda por la vida
Lo damos por sentado, pero cada día es un regalo que no todo el mundo recibe.
Cuando vives sin pensar en la muerte, cualquier minucia puede arruinarte el día. Te enfocas tanto en que falta que olvidas disfrutar de lo que ya tienes.
Cuando recuerdas que todo es efímero, cada día se vuelve valioso. Te hará disfrutar más los momentos cotidianos. Las conversaciones se enriquecen, los abrazos se sienten más cálidos y la vida se vuelve más rica. No es vivir con miedo, es vivir con intención. Con la certeza de que cada día cuenta.
No hay un "después" garantizado y que lo único que tienes asegurado es el ahora.
Una técnica útil para valorar lo que tienes es la del diario de gratitud (Wiseman, 2010).
Revive en tu diario una experiencia memorable.
Valora el papel que alguien tiene en tu vida.
Recuerda cosas que te hayan alegrado últimamente.
Reflexiona sobre un acción positiva que alguien hizo por ti.
Pueden ser cosas pequeñas o grandes, no importa. Lo que importa es volver a valorar lo que ya tienes e ignoras. Se ha demostrado que en tan solo unas pocas semanas mejora el bienestar y se reduce la insatisfacción (Wiseman, 2010).
5. Te hace resiliente
La muerte es un misterio. No sabemos qué hay después. No tenemos respuestas definitivas. Y eso da miedo. Pero también podemos verlo de otra forma: como una invitación a la curiosidad. A explorar. A aceptar lo incierto en lugar de resistirlo.
Pienso en las culturas orientales, en el budismo, en México y su día de los muertos…
Las personas que hablan de la muerte abiertamente son más resilientes.
Durante la pandemia, un estudio encontró que este tipo de personas sufrían menos ansiedad y se adaptaron mejor a las dificultades. No es que fueran insensibles, es que habían aprendido a convivir con la incertidumbre de la vida (Scrivner et al., 2020).
La muerte no es un enemigo.
Es un recordatorio. Un maestro que nos enseña a valorar lo que tenemos. A veces nos dejamos llevar por la rutina, pero podemos detenernos. Respirar. Preguntarnos: ¿estoy viviendo como realmente quiero? Y si la respuesta es "no", hacer algo al respecto.
Porque al final, la mejor manera de prepararse para la muerte es asegurarse de que, cuando llegue, podamos decir sin dudas: viví plenamente.
✍️ Te toca a ti: Si supieras que te quedan solo 6 meses de vida, ¿qué cambiarías hoy mismo?
💭 Cita del día: «Es lo desconocido lo que tememos cuando contemplamos la muerte y la oscuridad, nada más». J. K. Rowling.
¡Nos vemos en la próxima carta, cuídate mucho! 👋
Referencias 📚
Jobs, S. (2006, febrero). Steve Jobs Commencement Address at Stanford 2005. Academy At The Lakes. URL
Scrivner, C., Johnson, J. A., Kjeldgaard-Christiansen, J., & Clasen, M. (2020). Pandemic practice: Horror fans and morbidly curious individuals are more psychologically resilient during the COVID-19 pandemic. Personality And Individual Differences, 168, 110397. URL
Wiseman, R. (2010). 59 seconds: Think a Little Change a Lot. Pan Macmillan.
Gracias Álvaro por esta carta llena de aprendizajes, recordatorios y especialmente la importancia de agradecer el aquí y el ahora.
Hoy agradezco por tener el tiempo para leer esta carta y llevarme un mensaje que necesitaba hoy 🙏🏻
Brutal. El discurso de Stanford debería ser imprescindible para todo el mundo. El día que me lo hicieron descubrir cambiaron muchas cosas en mí.
Creo que si me quedara poco tiempo de vida haría varias cosas.Entre ellas disfrutar de los míos. Bailar bailar, abrazar y besar