Como madre estoy muy preocupada por la deriva que está tomando esto. Las niñas y niños están enganchados a las pantallas a edades muy tempranas, hasta hay apliques para poner en los carritos y que vayan entretenidos mientras van de paseo. Obvio es culpa de las madres y padres que nos es más cómodo anularlos y tenerlos calladitos y quietecitos en un rincón para que no nos molesten y poder hacer nuestras cosas como antes.
Siento que se va hablando más del tema y hay mayor autocrítica, pero queda mucho. Tampoco en las escuelas se está dando buen ejemplo, ya no solo porque en algunos coles usan tablets u ordenadores personales a edades en las que tendrían que estar manipulando cosas con las manos, sino que las pizarras de tiza ya no se usan a favor de las digitales y ponen videos de youtube para explicar cualquier cosa sin que esté justificado pedagogicamente.
Mucho por cambiar empezando por revisar nuestro uso y dar ejemplo.
El caso de la educación es especialmente paradójico, porque antes se apostaba por la digitalización, como si hubiera que llenar un colegio de tecnología para que fuese mejor. Ahora, he oído que en otros países lo están retirando y cada vez se piensa en cuidar más el uso de las pantallas a edades tempranas.
El problema con las pantalla es el mismo que tiene cualquier herramienta: hay que saber cómo usar la herramienta para usarla correctamente.
Los niños reciben un teléfono pero no se les educa a hacer un uso responsable, empezando por las horas de pantalla, la distancia a la que se la acercan a los ojos, el ser conscientes de que lo que ven no es real casi nunca (edición y filtros que hacen lucir a la gente perfecta).
Cuando te acostumbran a la velocidad a la que cambian las cosas en la pantalla, el mundo real te parece insípido, porque no va ni la mitad de rápido. Por eso el chico que menciono que vi en el autobús lloraba y lloraba. Para él, ver una hermosa playa durante un viaje era insufrible porque un teléfono es 1000 veces más interactivo y veloz.
Esa habituación daña la capacidad de concentración y ya te imaginas cómo de malo es eso a nivel de rendimiento académico y en la vida en general. Te vuelves incapaz de atender 5 minutos sin aburrirte y mirar a otro lado...
Excelentes reflexiones! Me siento identificada en la preocupación sobre el futuro de la niñez. El adulto aún conserva la posibilidad de elegir hacer algo diferente. Que pasa con nuestros niños que solo conocen esa dinámica de encuentro con el otro? Pueden elegir? Como equilibramos el uso de la tecnología, tan necesaria e importante, con la impronta presencial? Gracias por compartir!
Es un tema muy interesante y de plena actualidad. Siempre lo pienso así: nos ha llegado a las manos una herramienta extremadamente poderosa, pero sin manual de instrucciones. Un mal uso de la herramienta puede ser nocivo, pero bien usada, es magnífica.
La educación digital que reciben los jóvenes es muy escasa, pero pasan en lo digital la mayor parte del día. Es un tema de urgencia.
Me alegra que te haya inspirado. Es un tema que considero cada vez más importante. Todo es cada vez más digital, pero la educación no ha enseñado a nadie a interactuar con ese mundo digital. Esto puede generar serios problemas.
Imagina que te den una herramienta tan poderosa y sin instrucciones...
Me alegra que te haya inspirado. Es un tema al que yo también regreso con frecuencia. A veces veo cosas o leo ideas que me llevan aquí de nuevo. La verdad, vivimos en una época de cambios muy rápidos y a veces ni logramos adaptarnos a ellos plenamente.
Hola! Ante todo gracias por compartir unas reflexiones tan necesarias como certeras.
En cuanto a la pregunta te diré que muchas veces las redes me retienen más de lo que desearía y sí, es por el consumo de contenido rápido, que no requiere mucha atencion pero parece que si nos quedamos sin pantalla, no estamos agusto. Personalmente prefiero vivir en directo y pocas veces sacó el tf cuando estoy en la calle, porque me gusta observar hasta mis propios pensamientos.
Yo me acuerdo de que nos ponían unos horarios para ver la tele y que después te mandaban a hacer los deberes o a la calle. Comprendo que ahora mandar a la calle a un niño de siete años puede ser temerario pero tampoco es cuestión de sacárselo de encima dándole un celular. Estoy de acuerdo en que debemos dar ejemplo.
No eres la única persona a la que las redes sociales la retienen. De hecho, es lo más común, están diseñadas para eso. Es un poco difícil, pero se puede llegar a hacer un uso intencional.
Y sobre los niños sucede lo que tú dices, no es cuestión de distraerlo con un teléfono. De hecho, si ven que sus padres están todo el día con el teléfono, ellos verán que eso es un comportamiento normal, así que será aún más difícil educarlo.
Hay que ser un buen ejemplo a seguir y hacer que aprenda a usar la tecnología correctamente, como cualquier herramienta. Todas necesitan saber usarlas.
Una vez más me ha cautivado todo lo que dices y la manera tan clara en lo que expones, argumentando, invitándonos a reflexionar. Gracias Álvaro. En mi caso, llevo más de un mes replanteándome cómo comunicarme a través de redes sociales, con qué quedarme y qué soltar; hace poco hice un taller de literatura y nuevas tecnologías y conocí eso de la "economía de la atención", algo que existe hace rato y no tenía ni idea. Caí en cuenta que mientras unos mercantilizan con nuestra atención, otros muchos (y me incluyo) sirven a sus objetivos sin siquiera saberlo. No quiero ser parte de ese grupo y del otro, me parece que tampoco.
Como madre estoy muy preocupada por la deriva que está tomando esto. Las niñas y niños están enganchados a las pantallas a edades muy tempranas, hasta hay apliques para poner en los carritos y que vayan entretenidos mientras van de paseo. Obvio es culpa de las madres y padres que nos es más cómodo anularlos y tenerlos calladitos y quietecitos en un rincón para que no nos molesten y poder hacer nuestras cosas como antes.
Siento que se va hablando más del tema y hay mayor autocrítica, pero queda mucho. Tampoco en las escuelas se está dando buen ejemplo, ya no solo porque en algunos coles usan tablets u ordenadores personales a edades en las que tendrían que estar manipulando cosas con las manos, sino que las pizarras de tiza ya no se usan a favor de las digitales y ponen videos de youtube para explicar cualquier cosa sin que esté justificado pedagogicamente.
Mucho por cambiar empezando por revisar nuestro uso y dar ejemplo.
Gracias por estas reflexiones tan necesarias.
¡Hola! :)
El caso de la educación es especialmente paradójico, porque antes se apostaba por la digitalización, como si hubiera que llenar un colegio de tecnología para que fuese mejor. Ahora, he oído que en otros países lo están retirando y cada vez se piensa en cuidar más el uso de las pantallas a edades tempranas.
El problema con las pantalla es el mismo que tiene cualquier herramienta: hay que saber cómo usar la herramienta para usarla correctamente.
Los niños reciben un teléfono pero no se les educa a hacer un uso responsable, empezando por las horas de pantalla, la distancia a la que se la acercan a los ojos, el ser conscientes de que lo que ven no es real casi nunca (edición y filtros que hacen lucir a la gente perfecta).
Cuando te acostumbran a la velocidad a la que cambian las cosas en la pantalla, el mundo real te parece insípido, porque no va ni la mitad de rápido. Por eso el chico que menciono que vi en el autobús lloraba y lloraba. Para él, ver una hermosa playa durante un viaje era insufrible porque un teléfono es 1000 veces más interactivo y veloz.
Esa habituación daña la capacidad de concentración y ya te imaginas cómo de malo es eso a nivel de rendimiento académico y en la vida en general. Te vuelves incapaz de atender 5 minutos sin aburrirte y mirar a otro lado...
Excelentes reflexiones! Me siento identificada en la preocupación sobre el futuro de la niñez. El adulto aún conserva la posibilidad de elegir hacer algo diferente. Que pasa con nuestros niños que solo conocen esa dinámica de encuentro con el otro? Pueden elegir? Como equilibramos el uso de la tecnología, tan necesaria e importante, con la impronta presencial? Gracias por compartir!
¡Hola Claudia! :)
Es un tema muy interesante y de plena actualidad. Siempre lo pienso así: nos ha llegado a las manos una herramienta extremadamente poderosa, pero sin manual de instrucciones. Un mal uso de la herramienta puede ser nocivo, pero bien usada, es magnífica.
La educación digital que reciben los jóvenes es muy escasa, pero pasan en lo digital la mayor parte del día. Es un tema de urgencia.
¡Gran post y muy necesario!
¡Hola! :)
Me alegra que te haya inspirado. Es un tema que considero cada vez más importante. Todo es cada vez más digital, pero la educación no ha enseñado a nadie a interactuar con ese mundo digital. Esto puede generar serios problemas.
Imagina que te den una herramienta tan poderosa y sin instrucciones...
Me ha gustado muchísimo, he apuntado varias citas y pensamientos para poder regresar a ellos. Muchas gracias, Álvaro.
¡Hola Inés! :)
Me alegra que te haya inspirado. Es un tema al que yo también regreso con frecuencia. A veces veo cosas o leo ideas que me llevan aquí de nuevo. La verdad, vivimos en una época de cambios muy rápidos y a veces ni logramos adaptarnos a ellos plenamente.
Hola! Ante todo gracias por compartir unas reflexiones tan necesarias como certeras.
En cuanto a la pregunta te diré que muchas veces las redes me retienen más de lo que desearía y sí, es por el consumo de contenido rápido, que no requiere mucha atencion pero parece que si nos quedamos sin pantalla, no estamos agusto. Personalmente prefiero vivir en directo y pocas veces sacó el tf cuando estoy en la calle, porque me gusta observar hasta mis propios pensamientos.
Yo me acuerdo de que nos ponían unos horarios para ver la tele y que después te mandaban a hacer los deberes o a la calle. Comprendo que ahora mandar a la calle a un niño de siete años puede ser temerario pero tampoco es cuestión de sacárselo de encima dándole un celular. Estoy de acuerdo en que debemos dar ejemplo.
¡Hola Sara! :)
No eres la única persona a la que las redes sociales la retienen. De hecho, es lo más común, están diseñadas para eso. Es un poco difícil, pero se puede llegar a hacer un uso intencional.
Y sobre los niños sucede lo que tú dices, no es cuestión de distraerlo con un teléfono. De hecho, si ven que sus padres están todo el día con el teléfono, ellos verán que eso es un comportamiento normal, así que será aún más difícil educarlo.
Hay que ser un buen ejemplo a seguir y hacer que aprenda a usar la tecnología correctamente, como cualquier herramienta. Todas necesitan saber usarlas.
Gracias
¡Hola Ruber! :)
Me alegra que te haya inspirado. Es un tema de máxima actualidad y que afecta a toda la sociedad. Espero que te sirvan estas ideas.
Una vez más me ha cautivado todo lo que dices y la manera tan clara en lo que expones, argumentando, invitándonos a reflexionar. Gracias Álvaro. En mi caso, llevo más de un mes replanteándome cómo comunicarme a través de redes sociales, con qué quedarme y qué soltar; hace poco hice un taller de literatura y nuevas tecnologías y conocí eso de la "economía de la atención", algo que existe hace rato y no tenía ni idea. Caí en cuenta que mientras unos mercantilizan con nuestra atención, otros muchos (y me incluyo) sirven a sus objetivos sin siquiera saberlo. No quiero ser parte de ese grupo y del otro, me parece que tampoco.