Me funciona muchísimo el posponer la compra, a menos que sea algo que si no compro en el instante vaya a causar graves consecuencias, lo pongo en una lista y si después de unas semanas aún lo requiero lo compro o si no lo olvido.
Eso es genial Josué. Conocía una técnica similar, pero para decidir.
Es justamente eso, retrasar la decisión para tener mucha más claridad y no estar afectado por los sentimientos del momento cuando decides en caliente. Curiosamente, también se puede aplicar a las compras, tienes razón.
Mi respuesta: Me asigno un presupuesto mensual para mis compras "culturales" que retiro de mi pensión cada mes. Libros y subscripciones quedan limitados al presupuesto asignado. Me di cuenta de que en una librería compraba más compulsivamente que en una tienda de modas o en el super por distintas razones. Le puse remedio y ahora "gasto" en bienes culturales sin remordimientos.
Hay que hacer el esfuerzo de llevar claras las finanzas personales y también ser conscientes de efectos como este. De forma natural, tendemos a comprar porque aumentar nuestro número de posesiones nos genera gratificación, lo interesante está en saber en qué lo gastas y cuál es su finalidad. De lo contrario acabamos gastando más de lo debido donde no deberíamos.
La idea del gasto en cultura me pareció muy buena, es una forma simple y práctica.
Yo creo que el vivir en una sociedad capitalista y por ende, consumista, nos hace a todos crecer con el impulso de comprar, lo que viene muchas veces con un trasfondo más desde lo ansioso. Yo tuve muchos problemas en la vida por “siempre querer más cosas” o pensaba “¿porqué él tiene eso y yo no?”, y al final logré una forma de ser más genuina, donde el ser mucho más minimalista me ha hecho ser muy feliz y agradecida!
Lo que dices se puede resumir en una frase que me encanta: "no es más rico quien más tiene sino quien menos necesita". El clave está en saber cuándo y encontrar una cantidad óptima de posesiones en donde cada cosa tiene un motivo. No es fácil, pero a más consciente somos de esto, más fácil es comenzar a darnos cuenta de que sobran cosas.
¡Ese cambio que hiciste suena muy inspirador para mi!
¿Qué hago yo para evitar comprar más de lo que necesito?: Pensarlo más de 10 veces, evitando el impulso inicial. Al pensarlo busco argumentos acerca de por qué lo necesito, si realmente le daré uso y qué va a sustituir. Porque introducir más elementos en mi apartamento porque sí, ya no es una opción. Yo hace unos años, después de una ruptura, me mudé a un apartamento sin muebles, con lo que me cabía en una maleta y una mochila. Desde entonces, practico el minimalismo. ¡Y no veas lo bien que sienta!. No tengo nada que no necesite. (Otra idea de escritura que tengo en barbecho...)
Tu experiencia se resume en una frase que me encanta: "no es más rico quien más tiene sino quien menos necesita". La clave está en encontrar el equilibrio óptimo en el que tienes todo aquello que necesitas y sabes qué cosas no son realmente necesarias.
No es fácil, es luchar contra la tendencia innata de tener siempre más y más cosas, pero es una lucha que merece la pena.
No sabes cuánto me alegra saber que mis cartas te inspiran 🙏
Frase estoica donde las haya. Aunque es atribuida a Gandhi, entre otros, realmente fue Séneca quien sembró la chispa (al revés): «No es pobre el que tiene poco, sino el que aspira a mucho» ¡Me encanta! ❤️
Me doy cuenta que muchas veces, si puedo tener la paciencia de esperar que pase esa “necesidad” de tener determinada cosa, ya no la deseo tanto. Hay mucho de el imput de las redes, todo el tiempo te venden y todo el tiempo se genera la necesidad de tener. Yo trato de respirar mucho y elegir bien en que quiero gastar. Y tengo también un presupuesto destinado a mis placeres ( libros, suscripciones, etc.). Es como lograr un equilibrio entre darse gustos pero no comprar o tener cosas porque si. Gracias por los artículos, lindo día!
Es crucial hacer el ejercicio de analizar en qué gastamos el dinero y de retrasar la compra. Esa es una técnica muy poderosa para evitar el impulso inicial de comprar, que muchas veces es irracional.
¡Gracias por tu comentario! Yo no usaba la técnica de retrasar la compra, pero es muy útil 🙏.
El efecto Diderot es interesante, me gustó porque explica de forma muy clara la tendencia innata del ser humano a siempre necesitar más y más. El problema es que las necesidades humanas son infinitas y siempre faltarán posesiones. Es absurdo pretender llegar a una meta a través de un camino infinito.
Me funciona muchísimo el posponer la compra, a menos que sea algo que si no compro en el instante vaya a causar graves consecuencias, lo pongo en una lista y si después de unas semanas aún lo requiero lo compro o si no lo olvido.
Eso es genial Josué. Conocía una técnica similar, pero para decidir.
Es justamente eso, retrasar la decisión para tener mucha más claridad y no estar afectado por los sentimientos del momento cuando decides en caliente. Curiosamente, también se puede aplicar a las compras, tienes razón.
¡Gracias por eso!
Gracias por la calidad de tus artículos!
Mi respuesta: Me asigno un presupuesto mensual para mis compras "culturales" que retiro de mi pensión cada mes. Libros y subscripciones quedan limitados al presupuesto asignado. Me di cuenta de que en una librería compraba más compulsivamente que en una tienda de modas o en el super por distintas razones. Le puse remedio y ahora "gasto" en bienes culturales sin remordimientos.
Muy interesante tu caso, Maika.
Hay que hacer el esfuerzo de llevar claras las finanzas personales y también ser conscientes de efectos como este. De forma natural, tendemos a comprar porque aumentar nuestro número de posesiones nos genera gratificación, lo interesante está en saber en qué lo gastas y cuál es su finalidad. De lo contrario acabamos gastando más de lo debido donde no deberíamos.
La idea del gasto en cultura me pareció muy buena, es una forma simple y práctica.
Yo creo que el vivir en una sociedad capitalista y por ende, consumista, nos hace a todos crecer con el impulso de comprar, lo que viene muchas veces con un trasfondo más desde lo ansioso. Yo tuve muchos problemas en la vida por “siempre querer más cosas” o pensaba “¿porqué él tiene eso y yo no?”, y al final logré una forma de ser más genuina, donde el ser mucho más minimalista me ha hecho ser muy feliz y agradecida!
¡Hola!
Lo que dices se puede resumir en una frase que me encanta: "no es más rico quien más tiene sino quien menos necesita". El clave está en saber cuándo y encontrar una cantidad óptima de posesiones en donde cada cosa tiene un motivo. No es fácil, pero a más consciente somos de esto, más fácil es comenzar a darnos cuenta de que sobran cosas.
¡Ese cambio que hiciste suena muy inspirador para mi!
Álvarooooo ... ¡Cómo me tocas la fibra...! 😅
Pobre hombre, Diderot...
¿Qué hago yo para evitar comprar más de lo que necesito?: Pensarlo más de 10 veces, evitando el impulso inicial. Al pensarlo busco argumentos acerca de por qué lo necesito, si realmente le daré uso y qué va a sustituir. Porque introducir más elementos en mi apartamento porque sí, ya no es una opción. Yo hace unos años, después de una ruptura, me mudé a un apartamento sin muebles, con lo que me cabía en una maleta y una mochila. Desde entonces, practico el minimalismo. ¡Y no veas lo bien que sienta!. No tengo nada que no necesite. (Otra idea de escritura que tengo en barbecho...)
Gracias por estar. ❤️
Tu experiencia se resume en una frase que me encanta: "no es más rico quien más tiene sino quien menos necesita". La clave está en encontrar el equilibrio óptimo en el que tienes todo aquello que necesitas y sabes qué cosas no son realmente necesarias.
No es fácil, es luchar contra la tendencia innata de tener siempre más y más cosas, pero es una lucha que merece la pena.
No sabes cuánto me alegra saber que mis cartas te inspiran 🙏
Frase estoica donde las haya. Aunque es atribuida a Gandhi, entre otros, realmente fue Séneca quien sembró la chispa (al revés): «No es pobre el que tiene poco, sino el que aspira a mucho» ¡Me encanta! ❤️
Al final siempre volvemos a los clásicos griegos y romanos. Parece que todo el conocimiento emana o se inspira de ahí.
De Séneca leí algunos libros y tiene buenas reflexiones que 2000 años más tarde sigo considerando fundamentales.
Me doy cuenta que muchas veces, si puedo tener la paciencia de esperar que pase esa “necesidad” de tener determinada cosa, ya no la deseo tanto. Hay mucho de el imput de las redes, todo el tiempo te venden y todo el tiempo se genera la necesidad de tener. Yo trato de respirar mucho y elegir bien en que quiero gastar. Y tengo también un presupuesto destinado a mis placeres ( libros, suscripciones, etc.). Es como lograr un equilibrio entre darse gustos pero no comprar o tener cosas porque si. Gracias por los artículos, lindo día!
Qué interesante lo que dices.
Es crucial hacer el ejercicio de analizar en qué gastamos el dinero y de retrasar la compra. Esa es una técnica muy poderosa para evitar el impulso inicial de comprar, que muchas veces es irracional.
¡Gracias por tu comentario! Yo no usaba la técnica de retrasar la compra, pero es muy útil 🙏.
Pero la enciclopedia daba mucho dinero 🫰
Jajaja, sí, no es que estuviese pasando hambre.
Que gran artículo! Brota Economía por sus poros. Mi primer artículo también hablaba sobre patrones de consumo. Enhorabuena!
¡Hola Ménez y gracias por tu comentario 🙏!
El efecto Diderot es interesante, me gustó porque explica de forma muy clara la tendencia innata del ser humano a siempre necesitar más y más. El problema es que las necesidades humanas son infinitas y siempre faltarán posesiones. Es absurdo pretender llegar a una meta a través de un camino infinito.