¿Por qué Hitler nunca fue asesinado?
Cuando la historia de la humanidad pendía de un hilo
🏷️ Categorías: Historia.
«La probabilidad decía que algún día se nos acabaría la suerte».
Gene Kranz en “Failure is Not an Option”
La historia está llena de eventos fortuitos que han dictado el curso de la humanidad.
Una de las preguntas más intrigantes es por qué Hitler, uno de los dictadores más infames, nunca murió en un atentado y otras personas menos influyentes sí fallecieron. En realidad, Hitler puede tener el récord de más atentados sufridos, con más de 40 intentos, pero siempre sobrevivía por algún motivo. De haber tenido éxito alguno de los intentos, quizá la historia de la humanidad sería otra.
Hitler era astuto, era inteligente y hay que decirlo, tuvo algo de suerte.
Hitler era una persona cauta
Sabía perfectamente el peligro que su vida corría.
A diferencia de otros mandatarios, él no confiaba ni en su propio personal de seguridad. Desconfiaba incluso de sus más cercanos, por esto tuvo un estilo de vida errático y algo solitario.
Cambios de agenda: Hitler rara vez seguía un horario fijo, llegaba y se iba de los lugares más tarde o más temprano de lo esperado, siempre impredecible.
Cambios de ruta: Evitaba desplazarse por las vías principales o hacerlo siguiendo una ruta clara. Era difícil esperarle en un lugar y dispararle como sí hicieron con el presidente Kennedy.
Solo un círculo selecto: Solo unos pocos eran de su confianza. Era imposible infiltrarse y llegar hasta él.
Infinidad de intentos: todos fallidos
Unas 40 veces intentaron acabar con él, 20 de ellas están altamente documentadas, 0 de ellas tuvieron éxito (Moorhouse, 2006; Zentner et al., 1991).
Aquí tienes dos ocasiones que estuvieron muy cerca:
Atentado del 20 de Julio de 1944: Operación Valkiria
Uno de los intentos más famosos.
Un grupo de militares del propio régimen nazi le traicionaron. El complot lo organizó Claus von Stauffenberg. Su plan era acabar con el para tomar el control del gobierno y negociar el fin de la guerra.
El plan era simple:
Stauffenberg entraría en el cuartel general de Hitler aprovechando que es de las pocas personas de su círculo cercano.
Una vez dentro, colocaría una bomba en una maleta bajo la mesa de reuniones. La bomba detonaría a las 12:40, en mitad de la reunión que Hitler tendría ese día.
Esperar
Oír la explosión
Disfrutar
Sucedió el milagro
El azar tocó a Hitler en forma de suerte.
Poco antes de que la bomba detonara, la maleta fue movida por uno de los asistentes, quien, sin saberlo, alejó el explosivo de Hitler.
Cuando la bomba explotó, la pesada mesa de roble absorbió gran parte del impacto, resultando en solo heridas leves para Hitler. Cuatro personas murieron, pero el dictador sobrevivió casi ileso.
Así le mostraba Hitler a Mussolini cómo había quedado la habitación tras el atentado.
Atentado del 8 de Noviembre de 1939: El atentado de la cervecería
Un plan (casi) infalible
Georg Esler, un carpintero comunista alemán se dispuso a acabar él solo con Hitler en la cervecería Bürgerbräukeller de Múnich, donde solía ir a dar discursos (Haasis, 2013).
Georg pasó semanas preparando una bomba casera, luego se hizo pasar por personal de la cervecería y consiguió infiltrarse para esconder la bomba dentro de una columna del podio desde donde Hitler daría su discurso. La bomba estaba programada para detonar a las 21:20, cuando Hitler estaría en medio de su discurso.
Iba a retumbar la explosión en toda Alemania.
Sucedió el milagro
Una vez más, la imprevisibilidad de Hitler salvó su vida.
Hitler acortó su discurso y abandonó la cervecería antes de lo previsto.
La bomba explotó a las 21:20, justo cuando Elser había planeado, pero Hitler se había ido hace 13 minutos. Ocho personas murieron.
Hitler salió ileso.
Tardaron tiempo en atrapar a Georg, lo primero que Hitler pensó es que todo era obra de británicos y judíos (Bürgerbräukeller Bombing, 1939).
La historia de la humanidad
Francotiradores, veneno, bombas… con todo lo intentaron matar y siempre salía ileso.
La muerte temprana de Hitler podría haber acelerado la negociación de paz, evitando atrocidades y millones de muertos. Habría cambiado los libros de historia del siglo XX y el daño causado por el Holocausto.
Así de frágil es el hilo del que pende en ocasiones el destino de la humanidad.
¿Te ha interesado la curiosidad histórica? ¡Te leo en comentarios!
Hasta la próxima 👋
📚 Referencias
Bürgerbräukeller bombing (1939). (1939, 9 noviembre). Newspapers.com. https://www.newspapers.com/article/the-rhinelander-daily-news-brgerbrukel/64225490/
Georg Elser: Illustrierter Beobachter. Georg Elser Arbeitskrei. https://www.georg-elser-arbeitskreis.de/texts/attentat.htm
Haasis, H. G. (2013). Bombing Hitler: The Story of the Man Who Almost Assassinated the Führer. Simon and Schuster.
Kranz, G. (2009). Failure Is Not an Option: Mission Control From Mercury to Apollo 13 and Beyond. Simon and Schuster.
Moorhouse, R. (2006). Killing Hitler: The Plots, the Assassins, and the Dictator who Cheated Death. Bantam.
Zentner, C., Bedürftig, F., & Hackett, A. (1991). The Encyclopedia of the Third Reich. Macmillan Reference USA.
Siempre me he preguntado cómo fue posible la existencia de un Hitler... La respuesta está, quizá, solamente, en la última línea: en esa fragilidad de los instantes, en ese efecto mariposa que cambió la historia para siempre.
Cuando te das cuenta el caos que nos contiene, lindo leerte.